Respuesta:
Luego de un mes Monsieur G. regresa a Dupin y le dice que no pudo encontrar la carta. Conociendo al ministro, Dupin se puso a sí mismo en las botas del ministro, el ministro era inteligente y sabía dónde buscaría la policía la carta, por lo que la ocultó a simple vista, disimulando como si fuera una carta propia.